
Aprovechamos las vacaciones de Semana Santa para zumbarle a los Pirineos Catalanes, visitar esta zona de los Pirineos y sobre todo: descubrir que se siente viviendo en la furgo. Este viaje es el más importante de todos para mi: han sido muchas horas soñándolo y muchas las ganas de ir por la carretera sin rumbo, sin programa ni horarios. Lo mejor la compañía: Lolita. Para ella también es importante. Al fin y al cabo somos tres desconocidos camino a los Piris, tres desconocidos que nos hemos portado muuuuy bien y lo hemos pasado muuuy bien.
Nuestra primera ruta en furgo comienza el 09-04-2009 en L'Hospitalet de L'Infant (Tarragona). Estoy viviendo en esta localidad desde Febrero de este año y, hasta que me traslade a Barcelona, sobre Julio, este va a ser el campo base para muchas rutas en la Vagoneta.
Salimos tarde, a las 19:00.
Ver Ruta nº1: Pirinaica 1 en un mapa más grande
Solo horas antes conseguí cerrar el contrato del seguro obligatorio. Lo hice en Masa y Masa S.L., una correduria de seguros especializada en vehículos clásicos. El precio del seguro es de 148 €/año. Cubre lo básico durante 5.000 km al año (ni uno más), pero es un precio deputamadre. Recibí el fax de confirmación 5 minutos antes del cierre de la oficina, que lo hacían para toda la Semana Santa, o sea, que por poco nos quedamos sin ruta pirenaica.
Pasamos Lleida sobre las 21:00. La bordeamos para seguir ya por la N-230 buscando Vielha. Como estaba claro que no podríamos llegar a Vielha ese mismo día, decidimos quedarnos a dormir justo antes de entrar en el túnel (Túnel de Vielha). No lo tengo muy claro pero, por el mapa, creo que era la localidad de Sopeira porque justo aquí comienza el Embalse de Escales, que vimos al día siguiente. Paramos en un bar a tomar una cerveza y preguntar dónde podríamos quedarnos a dormir. Nos aconsejaron una parada de camiones a solo 1 km, así que allí nos fuimos. El lugar perfecto: dormimos junto al río, escuchando el sonido del agua, con la luna sobre nosotros y a solo unos metros del restaurante de carretera.

A la mañana, muy temprano, fuimos de los primeros en desayunar en el restaurante. Pan con ajo y tomate, cafelito con leche y zumo. El dueño del restaurante nos amenizó el desayuno contándonos cosas de la zona al hilo de las noticias de la TV.
Marchamos hacia Vielha. El túnel es cuesta abajo, cosa que nos sorprendió puesto que esperábamos ir subiendo hacia la montaña. El hecho es que cuando salimos del túnel todo era distinto: nevado, sombrío y con pocas casas por el lugar. Le zumbamos para Vielha y pasamos de largo con idea de volver después de nuestra visita a Bossost. Cambiamos de planes y tampoco paramos

Antes de marcharnos tomamos un caftito en la calle principal y nos volvimos para poder llegar a la hora de comer a Bossost. Después nos pegamos una SIESTESITA en la furgo que nos recargó las pilas.
Pusimos rumbo a Vielha pero volvimos a pasar de largo. No hay mucho que ver excepto muchos coches de gama alta y alto estandin. Seguimos hacia Salardú, Baqueira y Beret en el camino a Sort. Sin prisas paramos en Artíes, un pequeño pueblo junto al río. No pudimos pasar de largo, es encantador así que paramos la furgo y paseamos un rato junto al río.
La furgo se portó realmente bien en la subida al Puerto de la Bonaigua. En algunas subidas tuve que poner primera, pero esto es porque aún no nos conocemos muy bien. Poco a poco...
"que boniiiiiitoooo", "que chuuuuulooo", "mira daviiiiiiiiid"
Con Lolita sin volver la cara de la ventana y diciendo a cada minuto "que boniiiiiiito"..... superamos el puerto y empezamos a bajar por el Valle de Aenu. El río Aneu, que cambia de nombre según la zona del valle, es enorme y, al ser primavera baja como un torrente. Yo miraba mas el río que la carretera, y eso que la carretera era mas estrecha que el río. Como somos de sur y ahí escasea, el agua nos parecía algo extraño. En los Piris el agua está presente por todos lados: en el río, por las laderas de las montañas, en plan cascadas, por las cunetas corriendo junto a la furgo, etc. Para mi (y para Lola) fue hipnótico, donde había agua allí mirábamos y nos quedábamos escuchando el sonido que le acompañaba.
Llegamos a Sort (donde siempre toca). Justo al llegar vimos que había un camping a nuestra izquierda y lo fichamos para una posible y merecida ducha. Mientras, como era temprano, paseamos un poco por el centro del pueblo. De nuevo el rió lo domina todo. En este caso con importancia puesto que Sort es la capital de los deportes de aventuras de esta parte de los Piris. La cosa podría ser así: alguien te sube al puerto y después bajas haciendo rafting o kayak por el río hasta Sort, donde recoges los trastos y y te sientas en una de las tantas terrazas que hay en la calle principal comentando la jugada. Tenemos muchas ganas de probarlo así que nos reservamos plaza para la próxima.
Hoy es un día especial: CUMPLEAÑOS DE LOLITA. Tenemos tarta? pues no. Sin decirle nada compré lo que mas se parecía a una tarta: un pastelito redondo y lo reservé para la noche.
Se hizo de noche y teníamos unas ganas enormes de ducharnos. No lo hacíamos desde hacía dos días y ya iba tocando. Nos fuimos al camping que fichamos antes y después de un primer intento, me dejé convencer para ducharnos por la patilla. Al cabo de un minuto íbamos en fila india camino de las duchas como si lleváramos dos meses viviendo allí. La ducha con agua calentita nos sentó muuuuuuy bien. Ir en furgo por la vida tiene un inconveniente: la ducha diaria. O pagas 2 € o pasas un mal rato colandote por la cara. Tengo que pensar el asunto: por mi parte ya cuento con este gasto extraordinario en duchitas y agua caliente. Si cojen a Lolita yo no la conozco.

FELIZ CUMPLEAÑOS PIRENÁICOS LOLITA!!
Al día siguiente nos despertamos felices y listos para seguir descubriendo los Piris. Desayunamos en una cafetería de la calle que corre junto al rio. Depués... visita obligada a la Bruja de Oro, famosa en el munto entero, donde la lotería.
Menudo día nos esperaba. La furgo dispuesta a continuar. Nuestro siguiente destino: seguir adelante hasta que atardeciera.